domingo, 22 de julio de 2012

Cuando a un alma buena, le ocurren cosas malas.



El agua del mar rozaba suavemente mis zapatos, mientras yo observaba ponerse el Sol. La suave  brisa  de verano me echaba el pelo hacia atrás. Era agosto, un bonito mes donde los haya.

Moví un poco de arena con el pie, pensativa. Muchos recuerdos llegaban a mi mente de años anteriores en esta playa. Bañandome con la familia, jugando con la arena, comiendo helados…Por aquel entonces este sitio siempre estaba atestado de gente, pero por alguna razón hoy no. No había ni un alma disfrutando de la playa, lo que hacía que hoy fuera el día indicado.

Estaba decidido, no había vuelta atrás. Había tenido mucho tiempo para pensar sobre todo lo que había ocurrido, y desde luego esta no ha sido una idea repentina, sino que llevo meditándola  desde que me dieron la noticia. Pero por alguna razón, decidí esperar. No se a qué, supongo que  a que se obrara un milagro o me despertara y todo fuera una pesadilla, como en las películas. Pero conforme los meses pasaban, yo sabía que no habría esperanza para mi. Muchos pensarán que soy una cobarde por rendirme tan fácilmente, pero yo siempre he dicho que una retirada a tiempo siempre es buena.

Y por eso estoy aquí, con mis mejores pantalones y la camiseta más bonita. “Hay que tener un nivel, no pueden encontrarme de cualquier forma.”- me dije a mi misma.

Volví a pensar en todos mis seres queridos. Me echarían en falta, eso sin duda. Pero al menos les dejé algo para que me recordasen, algo a que aferrarse cuando me echen de menos. Nunca se me había dado bien escribir mis sentimientos, bueno, escribir en general. Pero esta vez tenía que hacerlo ya que no me podía ir, sin despedirme. Esta tarde, mientras todos merendaban o jugaban, yo me había dedicado a poner una carta en cada habitación, una para cada persona. Sabía que esto estropearía las pocas vacaciones que tenían y que, después de este año, se habían ganado. Pero era consciente de que si hubiera dejado que llegara Septiembre, volvería otra vez al hospital y ya no podría hacer nada; ellos tendrían un segundo año de sufrimiento, y yo otro más de dolor. Así que mejor hacerlo cuanto antes.

No pude evitar pensar en Marcus, ese canalla guaperas lo pasará mal, después de estar dos años robándome besos y caricias. Tan solo espero que no sufra, ni se sienta culpable, ni haga ninguna estupidez. No podría soportar que se hiciera daño por mi culpa.
También le dejé una carta a él. Contando lo muy enamorada que estaba y sigo estando de él, como sus besos me llevaban al cielo, como su sonrisa me alegraba el día, y lo mucho que significaba para mi.

Espero que todos ellos, tanto mi familia como Marcus, comprendan que lo que voy a hacer lo haré por su bien. Porque ya no puedo verles sufrir más por mi y porque sé que lo que me queda de vida la voy a tener que pasar con dolores insoportables, digan lo que digan.

Suspiré  profundamente y empecé a adentrarme en el mar. Cuando el agua me llegaba por la cintura, eché un último vistazo a mi espalda y dejé caer mi última lágrima. Deseando que todo esto hubiera sido diferente y que todos los planes que tenía para mi futuro no se hubieran disuelto tan rápido. Pero esto le tenía que pasar a alguien, y ese alguien he sido yo. Maldije mi suerte, por solo haberme traído malas noticias, en vez de traerme un coche, o dinero, o lo que sea que tenga la gente normal con una suerte normal.

Me volví y seguí avanzando, dejando que la corriente me llevara hacia dentro, perdiendo de vista la orilla y notando como poco a poco la vida se me escapaba.

Adiós familia

Adiós amigos

Adiós quimio

Adiós cáncer. 




2 comentarios:

  1. me parecia poco digno que una entrada como esta n otuviera un solo comentario. me ha llegado al corazon y ha hecho llorar..quiza porque conzco gente que tiene cancer y me da miedo que se deje llevar como esta chica, quiza porque te conzco a ti y me da miedo que con lo que te esta pasando te de por hacer una estupidez. asi que necesito que me digas que esto solo es una historia mas y n oes porque tu ahor ano estas bien. necesito que me prometas eso que te he pedido y tu me respondiste con un "lo intentare".
    porque lo siento, pero necesito algo mas que eso, espero que entiendas que esto es porque te quiero. seleina.

    ResponderEliminar
  2. Aquí me tienes, escondida bajo mis sábanas paranque no me pillen. Leyendo esto. Te dije que lo haría.
    No puedo decir más que: quítate la venda de los ojos. Vales mucho, mucho más de lo que piensas, incluso más de lo que piensan otras personas. Sabes escribir de PUTISIMA madre (sabes que no puedo soltar una frase sin tacos) y lo has deostrado en esta entrada.

    no sé si el comentario saldrá como anónimo, porque no me aclaro con el ipad, pero espero que sepas quién soy.

    Te quiero Ho Ju

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...