Aléjate. No, acércate.

Me persigues como si no hubiera un mañana. Siempre a mi lado, pero escondido para que no pueda echarte. Me acosas mientras estoy despierta en mis pensamientos y sigues acompañandome en cada uno de mis sueños.
 Eres una mezcla de sentimientos; eres alegría y felicidad. Eres tristeza y depresión. Eres aquello que me obliga a ahogarme en lágrimas, y lo que me impulsa a morir de la risa.
Te reflejas como una sombra en mi espejo oscureciendo todo lo que veo en él. Te clavas como una espina en mi corazón.
Te estas volviendo un aliado, parte de mi, algo de lo que ya no me puedo deshacer y sin lo cual ya no se vivir.  Mi dependencia de ti me asusta, pero sé que haga lo que haga, y a pesar de todo el daño que me produces siempre estarás a mi lado. Y eso, aunque pueda resultar raro, me reconforta. Porque cuando los demás se marchen, cuando las lágrimas me ahoguen y cuando las heridas me escuezan sé que estarás ahí.

Y eso, no puede ser tan malo, ¿no?

Ahora, finalmente podré miraros a los ojos y decir:

 "Sí, acabé volviéndome loca. Pero no es como pensaba."

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Sin inspiración. Sin tiempo 

PD: nuevo ask